Fuente: Departamento de Educación USACH.
Propiciar otros aprendizajes
Bajo la perspectiva de la investigadora, lo más difícil de resolver en estos momentos es que nos vemos migrando apresuradamente desde un modelo de educación tradicional, presencial o de interacciones ‘face to face’, a un sistema de educación online, porque “no nos resulta familiar y responde a propósitos distintos a los de enfrentar una pandemia. Esto afecta en Chile a millones de estudiantes tanto del sistema escolar como del sistema de educación superior y a un número igualmente importante de docentes. Y, por supuesto, al verse afectados los estudiantes también esto toca a las familias”, reflexionó.
Como educadora, la profesora invita a pensar en “flexibilizarnos y aprovechar la oportunidad de concebir la educación con una concepción menos curriculista y menos centrada en lo académico y en el pasar contenidos, particularmente en un contexto de cuarentena y encierro que afecta a toda la familia y quizás, particularmente a los niños y niñas más pequeños a quienes les cuesta mucho más entender el concepto de pandemia y lo que esto conlleva”, dijo.
La lectura por placer es uno de los aprendizajes que la Dra. Flores asegura que es posible propiciar, así como promover la escritura a través de la posibilidad de dejar por escrito cómo cada uno de los estudiantes ha vivido esta experiencia y que han aprendido de ella.
“Es indudable que esta situación ha producido aprendizajes de todo tipo, sería bueno que los estudiantes los visibilizaran a través de la escritura o la grabación de un video, la creación de representaciones, juego de roles, etc. Insisto que este el momento para innovar y para conceptualizar la educación de una manera distinta, menos academicista y más centrada en aquellos aprendizajes significativos y promover en los estudiantes una experiencia educativa más holística”, aseguró.
Actividades de calidad y significativas
Enseñar en un contexto online se ha convertido en un desafío tanto para estudiantes como para profesores, sobre todo para aquellos docentes que deben enseñar a leer a sus alumnos.
En cuanto a esto y considerando las normales distracciones que se producen en los hogares, la sugerencia de la académica es que “reconozcamos que todos los estudiantes son distintos, por lo tanto, es importante poder responder a estas diferencias organizando actividades de calidad y que sean significativas, por sobre la cantidad de guías o material que desarrolla cada estudiante, que soliciten la colaboración de los padres”, indica.
Y agrega: “Es en esta etapa de la escolaridad de los niños y niñas cuando los padres se sienten más vulnerables respecto al eventual éxito o fracaso escolar de sus hijos. Por lo tanto, su compromiso es mayor como también lo es el involucramiento en la vida escolar de sus hijos. Por lo tanto, la sugerencia sería aprovechar el material que se encuentra en el sitio Mineduc, por ejemplo, el programa de lectura inicial Leo Primero que incorpora guías didácticas para el profesor y que podrían ser utilizadas por los padres para apoyar el aprendizaje de sus hijos”.
“El Ministerio de Educación está haciendo un gran esfuerzo y posee material valioso online que no son solo guías: existen textos, videos y audios de libros que pueden ser utilizados”, sugiere.
Recomendaciones para los profesores en un contexto online
Siendo el aprendizaje una construcción social en compañía de otros, y considerando que en la educación online las interacciones se ven restringidas, tanto las interacciones profesor-estudiante como estudiante-estudiante, no existiendo la ayuda no jerarquizada que proveen los estudiantes a sus compañeros, la Dra. Flores sugiere a los profesores:
- Realizar clases sincrónicas de al menos 15 minutos para mantener a los estudiantes motivados, dar retroalimentación y tranquilizar a los padres o cuidadores.
- Pensar en que este no es un curso online, sino que se trata de trasladar la clase que tenían preparada para realizar en una modalidad tradicional a un sistema online, lo cual trae dificultades.
- Mantener una comunicación frecuente con los estudiantes o con los padres en el caso de niños y niñas de menor edad.
- Priorizar lo que realmente necesitan aprender los estudiantes, este no es tiempo normal.
- Planificar actividades sincrónicas y asincrónicas, ambas tienen ventajas y desventajas, pero deben utilizarse pensando en sus ventajas y el contenido del curso que desean tratar.
- Utilizar esta pandemia como una oportunidad para explorar el desarrollo de nuevos aprendizajes, de abordar los contenidos valóricos como la generosidad, empatía, responsabilidad. Esta es una gran oportunidad para promover la creatividad y la capacidad de innovar en los docentes.
Publicado el 7 de abril de 2020.