Con apoyo del Fondo VIME, el seminario busca revitalizar la memoria y prácticas educativas de Quilacahuín, en un espacio de diálogo y encuentro con niños, académicos y la comunidad.
Santiago, 6 de noviembre de 2024 – En una jornada marcada por el respeto y el diálogo, la Universidad de Santiago de Chile (Usach) y la comunidad de Quilacahuín del pueblo mapuche williche protagonizaron el Seminario de Educación Intercultural: Niñeces, Ruralidad y Pueblo Mapuche. Este encuentro fue organizado por la Facultad de Humanidades y respaldado por el Fondo VIME (código 675-2024) con el objetivo de co-construir una propuesta educativa intercultural que reivindique la memoria y prácticas pedagógicas williche.
Propuesta educativa mapuche williche: preservando la memoria y co-creando conocimientos
La propuesta presentada en este seminario por el Fondo VIME se articula en cuatro objetivos específicos que buscan no solo preservar, sino también revitalizar la identidad pedagógica mapuche williche en un contexto formal y bidireccional. Esta iniciativa, única en su tipo, incluye:
- Encuentros de memoria intergeneracionales para recopilar saberes y prácticas williche, respetando los protocolos tradicionales.
- Encuentros pedagógicos interculturales entre niños mapuche y no mapuche del sector, para explorar las formas de enseñanza que se reconocen como propias de su comunidad.
- Vinculación de la memoria oral y local con asignaturas específicas, fortaleciendo el principio de bidireccionalidad en la educación y co-creación del conocimiento.
- Encuentro intergeneracional de validación, donde se presentarán los resultados de este proceso de co-construcción en torno a una propuesta educativa mapuche williche.
La jornada comenzó con una rogativa mapuche, dirigida por la Machi Angélica Inayado y acompañada por figuras de la comunidad, como el Apo Ülmen José Troquian Trunci y los activadores de memoria de Quilacahuín -niñas y niños autores del libro Wiñosuam mütrümkafo Sragwe L´ewfü mo (Llamadores de memoria del Río Rahue), en un ambiente ceremonial que marcó el inicio de este evento. La Dra. Cristina Moyano Barahona, Decana de la Facultad de Humanidades, junto a otras autoridades, también ofrecieron palabras de bienvenida, haciendo énfasis en que “hoy, la Universidad de Santiago de Chile va a ser su casa. Esperamos que puedan vincularse con este lugar de una forma distinta, que puedan dejar la huella de su cosmovisión y sus tradiciones y que eso alimente a nuestra sociedad… Fue una opción de larga duración optar por fortalecer los vínculos con la Escuela Intercultural de Quilacahuín y su comunidad para generar espacios que permitan la revitalización de las memorias locales y orales de dicha zona, involucrando a hombres y mujeres de distintas generaciones, que mediante los actos de recordar, pueden volver a traer al presente aquello que forma parte de su identidad, de su ser colectivo, de su lengua y de la cosmovisión que se reactualiza de forma permanente”, expresó la Decana, subrayando la relevancia del evento en la vinculación de la Universidad con las tradiciones culturales de nuestro país.
“Yo estoy muy contenta de que ustedes hicieron un ejercicio de volver la vista a la memoria… Fíjense que por la memoria nosotros seguimos siendo Mapuche, Williche de donde somos, porque no está en el libro la historia de la abuela, pero si ustedes hacen este ejercicio van a volver a esta memoria. Tal vez nuestros antepasados no soñaron con estar aquí en la Universidad, pero hemos llegado. La Universidad pública les pertenece a los niños mapuche de todo el territorio y necesitamos llegar y abrazar los conocimientos para hacer el diálogo intercultural. Que este viaje de un lugar tan lejano que hicieron, sirva para la memoria, pero también para compartir espacios de conocimiento”, manifestó con genuino entusiasmo la Dra. Elisa Loncón al dar sus palabras de bienvenida.
La pedagogía mapuche en acción: Nguillatü y Mizagün
Durante la rogativa, o Nguillatü, la Machi Inayado, junto con el Apo Ülmen y las y los participantes, ofrecieron una ceremonia espiritual y de música tradicional mapuche (ayekan), que resonó entre los asistentes y evocó un espacio de profunda conexión cultural.
Más tarde, en el desayuno compartido (Mizagün), las y los participantes pudieron dialogar de manera cercana. Este espacio permitió a las y los niños interactuar directamente con miembros de la comunidad Usach e intercambiar de primera mano sus experiencias y saberes. “Me parece muy importante esta iniciativa. En esta experiencia hemos podido ver cómo los niños han puesto sus reflexiones en torno a sus memorias; es parte de lo que los pueblos indígenas necesitan para tener la memoria en la copresencia y también apoyar el cómo caminamos hacia el futuro y el seguir construyendo una sociedad plurinacional que respete las identidades”, comentó Ximena Montecinos, asistente a la actividad y Jefa Subrogante de la Oficina de Asuntos Indígenas de la Corporación Nacional de Desarrollo Indígena (Conadi), resaltando el valor de estos encuentros en el aprendizaje y la transmisión de conocimiento.
Reflexiones finales: una propuesta educativa para el futuro
El seminario culminó con el Nütram, una conversación formal donde académicos, estudiantes y miembros de la comunidad compartieron reflexiones desde sus propias experiencias y estudios. El académico Pedro Canales ofreció una introducción al conversatorio, en el que la comitiva de Quilacahuín y estudiantes de la Universidad de Los Lagos presentaron sus respectivas publicaciones sobre memoria y pedagogía. Este momento permitió conectar las visiones académicas con el conocimiento ancestral en un acto de co-construcción.
Rodrigo Ortíz, Coordinador de la Red de Egresados FAHU y uno de los gestores del proyecto, comentó que esta instancia se compone de “actividades inéditas que estamos realizando dentro de las instalaciones. Nunca habíamos tenido autoridades ancestrales en la Universidad y estamos haciendo el vínculo y estrechando los lazos con ellos para tener un futuro en cual no haya diferencia y los pueblos originarios tengan mejor y mayor acogida dentro de la Escuela”.
“Esto, de alguna forma, les genera a ellos (las y los niños) un espacio de ver a la universidad un poco más cerca, de que es posible llegar a las grandes academias. Estoy muy contento por eso, por todo el trabajo que ha hecho la gente que participó, desde la génesis y desde la idea de poder concretar el trabajo de hoy. Y hacer una invitación para que todas las universidades comprendan que Santiago no es Chile. Hay un norte, hay un extremo sur, hay islas donde también hay jóvenes que aspiran a una carrera, no solamente para escalar en el punto de vista de la sociedad, sino que también para poder volver a aportar con ese conocimiento que reciben de la academia hacia sus pueblos”, manifestó el Apo Ülmen a modo de reflexión.
“Es bonito que hoy en día la gente joven se reconozca con su cultura, con su sangre, con el fuego mapuche, y lo diga con alegría. Para una, como Autoridad Ancestral, como mapuche también, me siento orgullosa de ellos y contenta, porque lo dicen desde el corazón, no con vergüenza, porque en nuestros tiempos en los colegios mucha discriminación y nos costaba mucho hacerlo”, cerró la Machi Inayado.
Martina Orellana, estudiante de primer año de Pedagogía en Historia, y asistente al evento destacó que “fue súper impactante poder conectar y empatizar con la cultura mapuche, en especial como pedagogos en formación porque necesitamos entenderla para poder finalmente transmitirla”.
Finalmente, Benjamín Álvarez, estudiante del colegio de Quilacahuín y uno de los gestores del libro Llamadores de Memoria del Río Rahue, pudo concluir diciendo que “yo no soy mapuche pero me incorporé al proyecto porque me llamó mucho la atención. A través de éste fuimos desarrollando una personalidad en conjunto con mis compañeros y compañeras. Ha sido difícil poder transmitir lo que hemos realizado ahora en Santiago, pero lo que más me gustó es que aquí hay mucha cultura y nos hacen partícipes a todos, no hay tanta discriminación”.Con el respaldo del Fondo VIME y el compromiso de la Universidad de Santiago, esta iniciativa busca consolidar una pedagogía intercultural que integre y valore el conocimiento mapuche williche. A través de estos espacios de diálogo y aprendizaje mutuo, la Usach sigue promoviendo una educación inclusiva y conectada con las raíces de nuestro país.
Puedes descargar el libro «LLamadores de memoria del Río Rahue» aquí.
Créditos:
Texto: Luciano Guzmán N.
Imágenes y registros: Isidora Aranda V./Silvia Arias B./Luciano Guzmán N.
Edición: Luciano Guzmán N.