Las egresadas de la carrera de Licenciatura en Historia de la Universidad de Santiago de Chile, Sisa Córdova, Rocío Guajardo y María José Vallejos, se adjudicaron el proyecto VIME “Cuerpo y territorio: Mapeos colectivos para el fortalecimiento de redes territoriales entre mujeres y comunidad LGTB+ en la comuna de San Antonio”.
El proyecto, fue realizado en conjunto con la profesora de historia y gestora cultural Mariela Llancaqueo y tiene como eje central aportar al conocimiento sobre el impacto social y emocional que genera la actividad industrial y portuaria en la calidad de vida de mujeres y comunidad LGBT+.
Sobre la metodología de trabajo, la egresada Rocío Guajardo, se refirió a la amenaza del Megapuerto de San Antonio para la comunidad: “Durante el inicio del 2021 estuvimos investigando sobre la situación actual de San Antonio en relación al avance del puerto en dicha comuna, y el peligro que significa para la comunidad y los ecosistemas existentes el proyecto del Megapuerto en San Antonio… Este proyecto nos permitirá acercarnos a las distintas problemáticas que vive la gente en particular, comunidades invisibilizadas históricamente como lo son las mujeres y personas LGTBI+, quienes sufren distintos tipos de violencias a partir de su experiencia concreta de habitar la ciudad”, sostuvo.
Además, la ex estudiante considera relevante destacar estos temas dentro del quehacer universitario: “Consideramos de gran importancia y urgencia que tanto FAHU como la USACH, en general, se acerquen y generen conocimiento en torno a las distintas temáticas relacionadas a género y sexualidades, por ser temas relevantes hoy en día tanto a nivel académico como social, político y cultural”.
Este proyecto de investigación permitirá generar un diagnóstico del cuerpo/territorio por medio de cartografías corporales y territoriales, en base a las experiencias de quienes participen.
En esa dirección, la egresada Sisa Córdova, considera que el derecho al buen vivir está siendo desplazado por el avance industrial en la zona: “Desde nuestra postura feminista consideramos de gran relevancia alzar y aunar las voces de mujeres y comunidad disidente entre distintos territorios, que si bien transcurren y habitan distintas experiencias, están cruzadas por las mismas problemáticas, las comunidades de Puchuncaví/Quinteros, con las de San Antonio, con las de Huasco, con las de Quilicura, con las de Arauco; y es que, se está privilegiando el avance industrial por sobre el derecho a un buen vivir de las comunidades”.
Sobre la organización de los datos y la información recopilada, la egresada considera importante el trabajo desde las voces corporales: “Trabajamos desde la horizontalidad, pero cada una desde un rol, en este caso yo asumí el rol de gestora/coordinadora del proyecto, soy el primer contacto o «puente» entre el proyecto y la comunidad para realizar cualquier tipo de actividad o visita, además de organizar la orgánica del equipo de trabajo… Si bien cada una cumple una función, las tres ideamos la investigación a un proyecto que contenga las voces corporales que vive un territorio amenazado por el neoextractivismo”.
Respecto de las expectativas que se tienen sobre el proyecto, la ex estudiante de Licenciatura en Historia, espera contribuir al conocimiento desde las comunidades: “Creemos necesario que desde el encuentro con la comunidad podemos articular para denunciar y accionar en colectivo la forma en que queremos habitar nuestros cuerpos y territorios… Hacemos un llamado a volcar nuestros conocimientos como estudiantes o egresados a nuestras comunidades, porque para transformar hay que accionar”, finalizó.
Puedes revisar el detalle de los proyectos adjudicados Fondos VIME 2022, aquí: bit.ly/3u6Wfym