En el marco del compromiso institucional con el fortalecimiento del sector público y la vinculación con el medio, la Unidad de Educación Continua de la Facultad de Humanidades de la Universidad de Santiago impartió el curso “Liderazgo para la gestión del Cambio” a funcionarios y jefaturas del Hospital Sótero del Río.
La actividad, realizada el pasado 16 de diciembre, tuvo como objetivo entregar herramientas prácticas para la planificación y ejecución de procesos de transformación organizacional en un entorno sanitario de alta complejidad. El programa académico, abordó la necesidad crítica de coordinación vertical y horizontal dentro de la red de salud. Ante la constante modernización de los modelos de atención, la iniciativa buscó desarrollar competencias que permitan a los líderes hospitalarios gestionar la flexibilidad y resiliencia de sus equipos.
El académico a cargo, Dr. Andrés Pucheu, destacó la importancia de mediar en las dinámicas interpersonales que surgen en las instituciones modernas. “Estamos trabajando en el cambio de roles que ocurre en el sistema de salud y de cómo ajustar ese cambio en las conversaciones entre distintas generaciones, géneros y posiciones. Aparece un conflicto entre antiguas y más jóvenes y es necesario mediar ese conflicto hablando con cada persona para lograr explicar cómo pueden trabajar en las instrucciones cotidianas”.
La instancia formativa reunió a diversos perfiles profesionales del recinto hospitalario, desde áreas clínicas hasta departamentos de ingeniería. Para jefaturas que provienen de formaciones científicas rigurosas, este tipo de perfeccionamiento abre una ventana necesaria hacia las habilidades blandas y la gestión de equipos humanos. Diego Zapata, jefe del Laboratorio Clínico del hospital, valoró el enfoque humano:“Nosotros trabajamos en un área que es sumamente técnica y muchas veces muy cuadrada, entonces de repente nos dejamos llevar un poquito por esa visión en la que todo es muy rígido. Entonces este tipo de cosas nos permite recordar que, en el fondo, nuestro proceso se rodea de interacción humana; interacción humana donde hay errores, donde hay cosas mejores (…) y donde hay cosas distintas, con las que debes saber convivir y trabajar en equipo”.
Uno de los aspectos más valorados por los asistentes fue la metodología aplicada, la cual se alejó de la cátedra tradicional para centrarse en el análisis de casos y la resolución de conflictos reales. Carla Silva, matrona supervisora del CR Ambulatorio, destacó la calidad del cuerpo docente: “Tengo la fortuna de haber sido seleccionada, esta es mi segunda experiencia con un curso desarrollado por la Facultad de Humanidades (…) Y me encanta porque los relatores son muy profesionales. Son personas que realmente se nota que conocen perfectamente lo que hacen y son capaces de darnos a nosotros todos los tips sobre cómo funcionar mejor o cómo realizar nuestras labores de mejor manera dentro del quehacer diario”.
Por su parte Francisco Aguirre, enfermero jefe del Centro de Responsabilidad de Hospitalización Domiciliaria, subrayó la responsabilidad que recae sobre los líderes para mantener la cohesión y el cumplimiento de objetivos en unidades críticas. “En este hospital se requiere una capacitación continua, tenemos grandes desafíos (…) Y esos equipos tienen altos desafíos generacionales, de conocimiento, motivacionales. Y los jefes tenemos que estar al día en los conocimientos, las habilidades para poder guiar bien a nuestros funcionarios al hacer lograr el objetivo, la atención de los usuarios, entre otras cosas”.
Nicolás Pérez, jefe del Departamento de Ingeniería y Mantenimiento, enfatizó la utilidad inmediata de las herramientas adquiridas para la resolución de contingencias. “Hasta el momento ha sido súper satisfactorio. Se nos han presentado herramientas de cómo abordar ciertas contingencias diarias, elementos del diario vivir, con una metodología distinta y un poco más aplicada, con un enfoque a poder resolver conflictos, a obtener mejores resultados”.
Este curso reafirma la misión de la Facultad de Humanidades Usach de contribuir al desarrollo del país mediante la transferencia de conocimientos especializados a las instituciones públicas, mejorando así la calidad del servicio que reciben los usuarios del sistema de salud.
Créditos:
Redacción: Sofía Molina C.
Fotografías: Sofía molina C.
Edición: Luciano Guzmán N.